14 de agosto de 2008

El Día que Piazzolla Conoció a Gardel

De http://www.lamanana.com.ar/
Un día, don Vicente se enteró que Gardel estaba en Nueva York, éste había alquilado un lugar en el piso 18 del edificio de Bellas Artes, en la calle Cuarenta y Ocho. Vicente le comenta a Asunta, su esposa, que le tallaría en madera un regalo, un guitarrista, para mandárselo como tributo de su admiración.

Mandó a su hijo, Astor, a llevar el presente con la invitación de comer ravioles, pero con la recomendación de fijar el día para estar preparados. Allí va el inquieto Astor, con un paquete, preguntándose quién sería ese tipo tan importante. Gardel le cayó bien de entrada, le gustaba ese hombre alegre, que lo trataba como si lo conociera de toda la vida, se despidió con la promesa de volver al otro día con su bandoneón.

Diana Piazzolla relata el siguiente encuentro:"Al día siguiente, con una camisa blanca y un pantalón azul, Astor caminó despacio hacia el departamento de su amigo. Cuando llegó, Carlos ya estaba listo. Camisa francesa de seda natural, traje claro, corbata a rayas. le ofreció un vaso de leche.
- Sentate tranquilo, tomá la leche y tocate algo en el bandoneón - dijo y se sentó a su lado.
Astor colocó el bandoneón sobre sus rodillas y tocó: un poco de Gershwin, algunos valses, una ranchera, un tango. Gardel lo miraba y sonreía.
Después del tango habló:- Vas a ser algo grande, pibe, te lo digo yo... Pero al tango lo tocas como un gallego.
- Es que tengo que ensayar, yo de tango no sé mucho - se disculpó Astor
- Metele, que vas a llegar. Y ahora vamos que quiero conocer la ciudad.

Caminaron toda la mañana. Gardel se probó camisas, compró zapatos, trajes, corbatas y al mediodía comieron ravioles en el Santa Lucía. Astor le mostró sus escuelas, la casa de George Raft, el Central Park, el River Side, los alrededores de Harlem.

- ¿A vos te gusta el jazz? - preguntó Gardel, al ver el entusiasmo con que Astor hablaba de Cab Calloway.
- Es lo que más me gusta. El tango todavía no lo entiendo..
- Cuando lo entiendas, no lo vas a dejar...

Siguieron caminando. Gardel se había encariñado con aquel pibe que quería saber acerca de las noches de Buenos Aires, y Astor ya no olvidaría a ese hombre que tomaba todo con calma, como si la vida fuera interminable, y que se entristecía cuando hablaban de Argentina."

Astor grabó un disco con Gardel y participaría en la película El día que quieras, haciendo el papel de canillita, un papel que le calzaba justo.Gardel quedó tan entusiasmado con el pequeño Piazzolla que le ofreció a los padres llevarlo con él a la gira que iba a realizar próximamente, pero Vicente inflexible, se negó rotundamente, Astor era todavía un niño. Esa tarde, con café con leche de por medio y buñuelos preparados especialmente por Asunta, se vieron por última vez Gardel y Piazzolla. Carlos, calmo y sonriente, con un dejo de nostalgia porque dejaba a su pequeño amigo; Astor, enojado y frustrado, porque se había ilusionado con esa gira y ya imaginaba lugares y aventuras. Esa tarde se despidieron, cada uno con su destino a cuestas. A uno lo esperaba un vuelo fatídico que lo convertiría en un mito renovado año a año; al otro, le aguardaban años de formación, de lucha a brazo partido para imponer su música, la que revolucionó el tango y que dejaría, en su ausencia, un hueco imposible de llenar.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

jaja no! me encantó este artículo! Es verdad no???

Me hace acordar a aquella tarde Costa Rica en la que, frente a nuestro apasionado, frenético, entusiasta, culto, sabio, y extremista amigo poeta (cuyo nombre no recuerdo), Pipi nos contaba la historia de Astor.

Somos 5, pero somos miles. dijo...

Lástima que el destino no logró unirlos para así regalarnos la voz del "zorzal" con música de Astor, y fusionar así 1 exponente del "tango tradicional"c omo lo era gardel y un "revolucionario del tango" como lo era piazzolla.

Mágico debe ser el encuentro musical entre ellos en donde estén en este momento.

Anónimo dijo...

Respeto mucho a Gardel, pero agradezco con el alma que Astor no haya decidido acompañarlo. Si lo hubiese hecho, el mundo se hubiera privado de uno de los mùsicos màs importantes del siglo XX

Somos 5, pero somos miles. dijo...

YO hablaba de 1 supuesto encuentro entre estos dos iluminados si no se producía aquel terible accidente en Colombia.

Anónimo dijo...

Qué hubiera pasado si Astor hubiese ido en esa gira? Tendríamos hoy a "Adios, Nonino" y "Balada para un loco"??

O es al revéz? Ese encuentro nos podrñia haber dado algo mas maravilloso aún?

Podemos reprocharle a Vicente por privarnos de algo que podría haber sido genial?

O tenemos que agradecerle porque ese miedo de padre (quizas sobreprotector) nos dio al Astor que conocemos y admiramos?

Anónimo dijo...

Etequete... que gran historia! Júroles que se me puso piel de pollo. Gran Blog, recién lo descubro, pero por lo pronto mis felicitaciones por convidarnos un poco de sus vivencias y andanzas deíndole mochilística (?). Saluda una gran fan (sobre todo de cande) Lula