Viajar es, por supuesto, la confesión de la impotencia: ir a buscar lo que te falta a otros lugares. Si realmente creyera que no necesito nada más me quedaría en casa. Si realmente creyera que no necesito nada más sería un necio. Si realmente creyera que no necesito nada más sería feliz. Lo intento, desde hace mucho tiempo.
Pero la vejez -¿he dicho la vejez?- consiste en saber desde el principio que un viaje siempre temrina.
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Los azares son aterradores y nada los vuelves más visibles que un buen viaje
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6 comentarios:
Confieso que no le temo al azar (será que en general a sido convaleciente conmigo y nuestros viajes) y aunque disfruto viajar sola, ustedes me dan una "mejor soledad" que si no estuviese acompañada.
Lo que sí: Me declaro impotente.
Me declaro incompetente, insaciable, curiosa y me atrevo a decir insatisfecha. Si un día creyera que no necesito más, me preocuparía.
"Si realmente creyera que no necesito nada más sería feliz"... si realmente creyera que no necesito nada mas... estaría muerta. Creo que, por el contrario, parte de la felicidad es saber encontrar siempre cosas nuevas para descubrir y necesitar... y eso es lo que se hace viajando no?
tengo algunas lineas para regalar al "somos miles", como te prometi... no se si estaran a la altura de su blog, pero me animo a que lo evaluen! no se como escribirlos aca, dps te los paso cande
Ojo... hay gente que va viva por el mundo creyendo que no necesita anda mas. Es muy fácil confundir bienestar con felicidad.
Bienvenidas sean tus líneas sophia y las de quien quiera! Mandamelas por mail.
chofa esperamos ansiosas tu post!!!!
beso
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